sábado, 13 de febrero de 2010

Happy Valentine's.



Se acerca San Valentín. Y si bien la misión de Canturreando viene a ser cagarse en este tipo de cosas, sobretodo en ESTE tipo de cosas, no lo voy a hacer.
Hablemos de Valentín.
Este hombre era sacerdote en la época de Claudio II, que pensaba que los hombres eran mejores como soldados que como enamorados. Hasta ahí podríamos estar de acuerdo. Así que prohibió las bodas entre la gente joven. Con muy buen criterio. También prohibió la doctrina cristiana -era Claudio el hombre de mi vida?- porque ahí no había más divinidad que él.

Valentín, que ejercía el laicismo sólo de boquilla pero que resultó ser un grandísimo pacificador a la par que ser humano, comenzó a vender excepciones al ejército en forma de matrimonio, todo esto de tapadillo. Y digo vender porque el precio era acogerse a la fe cristiana. Así que por cada uno que estaba muy enamorado de su novia, le venían tres que preferían no partirse el jeto por Claudio Emperador. Nunca sabremos quién sí y quién no, pero crea fama y échate a dormir, que ya le sacará rédito el Corte Inglés.

Todo era muy bonito y romántico hasta que llegó a oídos de quien tenía que llegar.
- Lo siento, Valentín, pero esto tiene que acabar, nos dejas sin huestes.
- Bueno, pero antes deja que te cuente una historia sobre un carpintero, su novia y cierta paloma.

Valentín debía ser un grandísimo orador, porque Claudio no sólo lo dejó libre sino que casi se convierte. Pero su familia lo llamó al orden -Claudio, no jodas que te has creído lo de la paloma!- y nuestro héroe fue hecho preso.

Fue torturado hasta hacerlo renegar del amor y sus bondades? grilletes, ganchos, teas? santificación por martirio, pues? No, no, si murió fusilado. Entonces? Es que cuando estaba preso, su cautor, con un alto sentido del cachondeo, le llevó a su hija ciega para que la enseñara a leer. Ahí es donde la Iglesia nos dice que la muchacha recuperó la vista y nosotros tenemos que tragar. Da igual, lo fusilaron con milagro incluido el 14 de febrero.

Entonces nosotros celebramos que estamos muy enamorados y nos hacemos regalos caros. Bueno, vosotros. Yo me he pasado los últimos años con un chico muy majo que no se creía lo de la ciega. Por más que se lo adornara no hubo manera. Qué rabia. Mis amigas con sus regalos de novios crédulos y yo con un científico vacío material.

Porque esto es como la navidad. Qué le queda sin los regalos? celebrar el nacimiento del niño dios? Aburrido. Pues lo mismo.
Por lo que pueda ser, este año colgaré mi calcetín de San Valentín, que es el de navidad pero descosiendo el reno y pegando un corazón. Si alguien que no sea Ernesto cree que soy la mejor, que me dibuje un pato y me lo envíe por mail. Qué te han regalado? Un dibujo de un pato. Hay más verdad en eso que en un jodido anillo. Con todos mis respetos para los que vayan a regalar un jodido anillo.

Así que Canturreando no se muestra ni a favor ni en contra. Nos fastidia el consumismo pero nos gusta el amor.
Somos asín.

A quererse, amiguitos.

4 comentarios:

Ernesto dijo...

No me queda claro. Yo te puedo enviar un pato o no?

Maria dijo...

Hasta cinco. Que el pobre calcetín salve el honor.

LIBI dijo...

como te vas quedar sin pato, no se dibujar patos y se puede parecer a un ornitorrico, pero voy a enviarte algo.
Felicidades.

Maria dijo...

Jajajajajajajajaja!!! muy bonito tu dibujo, enana, se ve perfectamente que es un pato. Muchas gracias, corazón. Besitos para todos!